"Probablemente la última persona que usted esperaría ver triunfando en el deporte profesional".
Así empieza la reseña de su autobiografía, titulada 'Longshot. Las aventuras de un niño sordo mormón fundamentalista y su viaje hacia la NBA'.
Las barreras que ha tenido que derribar este ejemplo de superación personal son infinitas.
Lance Allred (29 años, 2.10 m.) padece trastornos obsesivos-compulsivos, es decir, tiene pensamientos que no desea (obsesiones) y repite ciertos comportamientos (compulsiones) una y otra vez.
Pasó su infancia en una comuna mormona polígama y durante su primera etapa como jugador universitario, en la reputada universidad de Utah, tuvo que soportar continuos abusos verbales del 'prestigioso' entrenador, Rick Majerus, sobre todo por su sordera (oye entre un 75%-80% menos que una persona normal).
"Lance, te mientes a ti mismo usando tu sordera como una excusa. Eres la vergüenza de los discapacitados. Si yo estuviera sentado en una silla de ruedas y viera cómo juegas al baloncesto, me pegaría un tiro". La desafortuna frasecita se la dijo un día Majerus aAllred, que denunció el caso.
Majerus se fue de rositas pero le costó al menos una seria investigación.
Allred cambió entonces de universidad; en Webber State siguió su progresión y aunque no fue elegido en el draft, sí le valío para hacer carrera profesional fuera de Estados Unidos.
En la temporada 2005-06, jugó diez partidos en el Sedesa Lliria de la LEB, con promedios de15 puntos y 7 rebotes.
En la 2006-07 volvió a USA para probar en la D-League (Idaho Stampede), y el gran día llegó el13 de marzo de 2008, cuando debutó, 18 segundos, con los Cleveland Cavaliers (tres partidos en total), lo que le convirtió en el primer y único jugador sordo en la historia de la NBA.
Ahora ha firmado con los Indiana Pacers para pelear en el training camp por quedarse en la plantilla: "Llegué (el domingo) por la noche a Indiana e hizo un buen entrenamiento en mi primer días", relata el protagonista en la conocida web 'FanHouse'. "Hansbrough y Foster están lesionados, así que me hizo mucho ilusión venir, sabiendo que tendría responsabilidades".
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