El jugador francés, que el año pasado jugó con Atlanta y en la D-League, vuelve así a su país de origen.
Pape Sy (Francia, 1988) quizás sea un desconocido para la gran mayoría. Se trata de uno de los mayores talentos jóvenes de Francia, juega de escolta y en 2010 fue drafteado por Atlanta en la 52ª posición del draft.
Ante la falta de minutos en Estados Unidos, y aprovechando el cierre patronal, la intención de Sy era volver a Francia, donde ya tenía apalabrada la contratación por el BCM Gravelines. Pero los Hawks no quieren perderlo del todo, y le obligarán a volver en cuanto finalice el lockout. Para el equipo se trata de un gran fichaje, con tal de optar a dar cierto salto de calidad. El jugador por su parte tendrá la oportunidad de demostrar su validez e imponer sus 2,01 en la posición de escolta.
De todas formas el nuevo convenio colectivo podría cambiar la situación del francés en la NBA, ya que beneficiará a los jugadores más jóvenes.
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