No había demasiadas dudas de que la liga aprobaría que Tom Benson se convirtiera en el nuevo propietario de los New Orleans Hornets tras aceptar su oferta de 338 millones, como anunciábamos hace dos meses.
Benson, que también es dueño de los New Orleans Saints de la NFL, planea mantener el equipo en la ciudad, cumpliendo así la principal condición del resto de propietarios.
De esta forma la liga consigue deshacerse de la propiedad de los Hornets, que le ha llevado por el camino de la amargura. A las numerosas críticas que tuvieron que hacer frente cuando se anuló el traspaso que llevaba a Chris Paul a los Lakers a cambio de, entre otros, Pau Gasol, se han sumado las voces que sospechan un posible amaño en la lotería del draft, que otorgó la primera elección a los Hornets.
De una forma u otra, el Board of Governors de la NBA volverá a tener 30 voces y los aficionados de los Hornets por fin pueden respirar tranquilos a la espera de la casi segura llegada de Anthony Davis.
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